GLOBALISTAS CONTRA PATRIOTAS

El confinamiento por la pandemia del COVID-19 le ha convenido a tirios y a troyanos. Les ha caído como "anillo al dedo" para aprovecharlo.

A unos, para tratar de implantar un Nuevo Orden Mundial -que ya lo festejan como una realidad-, a través de la ONU, la OMS y el FMI. Y es a través de la Izquierda radical que están dando el zarpazo para crear caos social y el empobrecimiento de la población. El objetivo es cambiar el paradigma de lo que quedaba de la Civilización Cristiana Occidental e imponer un nuevo modelo al estilo chino.

A otros, para declarar la guerra al Estado Profundo -alineado con el Nuevo Orden Mundial- y de paso asestar un duro golpe a la Red Mundial de Trata de personas -incluyendo a los menores- que resulta el más repugnante vicio de las Élites pedófilas.

En estos momentos, mientras está usted confinado en su casa, mordiéndose las uñas por el actual estado de la pandemia y de la economía, está la guerra a "todo lo que da".

La falta de información veraz y comprobable, no nos da algún indicio de quién va ganando la batalla. Por un lado, los voceros de Qanon, que representa a los Patriotas de los Estados Unidos, dan cifras alegres, alegando que durante el confinamiento han hecho arrestos masivos en Europa y los Estados Unidos; que sorprenderá la gran cantidad de millonarios de las Élites y grandes nombres de la Realeza, la Banca, la política y la farándula han caído en las redes.

Por el otro lado, la Élite hace callar a los medios de comunicación -que ellos controlan-, y sólo hablan de los defectos de Trump, al grado de corromper a la sobrina del Presidente, Mary Trump, quien afirmó la incapacidad de su tío para administrar a la nación; hablan de todos sus errores por el control del coronavirus, lo hacen responsable de las muertes y manipulan las tendencias del voto a favor de Biden, y todo el caos durante las protestas orquestadas por Antifas y Black Lives Matter.

Así están las cosas en esta implacable guerra por imponer cada uno de ellos su propia visión del mundo.

A los occidentales nos conviene, con razón, estar al lado de los Patriotas del mundo, ya que son afines a nuestras costumbres y tradiciones. Ellos conservarían nuestro tradicional modo de vida, son anti-abortos -ProVida-, creen en Dios como ser supremo del universo y lo consideran como Señor y Dador de la vida, respetan la propiedad privada y son los adalides de la Democracia.

Por el otro lado, los Globalistas: son ateos, -y sin embargo adoran a Satán-, apoyan las dictaduras y para ellos, el mejor pueblo es el pueblo pobre; son elitistas y todos los bienes y propiedades deben pertenecer al Estado, no respetan las Constituciones de los pueblos, ni sus costumbres y tradiciones, tienen un sentido "humanista" global y consideran a los hombres "cosas" e instrumentos de la producción, son pésimos administradores y tienen una ambición personal descomunal, no tienen pizca de moralidad como nosotros lo entendemos, no reconocen fronteras y rechazan las costumbres y particularidades de los pueblos. Su objetivo es el ORO, para poseerlo, no para el desarrollo de las naciones sino para el éxtasis egoísta de su posesión. Persiguen a la familia y su objetivo es la destrucción de la misma, de la Iniciativa Privada, del Ejército Nacional, de las Iglesias y de todas las instituciones de los Estados.

Si eres ateo, repudias a la familia y las instituciones, no tienes respeto por la vida, odias a los ancianos y al conocimiento, aplaudes la ignorancia, te gusta la holgazanería, la pobreza y la pedofilia... entonces eres un globalista.

Sin embargo, si tienes temor de Dios, respetas a la familia, eres ProVida, te gusta el orden y el progreso... entonces eres nacionalista, ¡todo un patriota! 

¡Nos encantaría escucharte!

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