CUBA A LA VANGUARDIA
No tenemos argumentos para negar que el gobierno cubano sigue siendo quien va adelante en el arte de reprimir, controlar, manipular a su pueblo, y que todas las demás dictaduras del continente reciben cátedra al respecto. La última jugada, sobre el control de la información, es una muestra de una obra bien acabada del desprecio a las libertades humanas. No les basta la carencia de casa, vestido, sustento, y de medicinas; a la que tienen sometida a toda la población. Ahora han implementado el "tarifaso", término acuñado por el pueblo, para referirse al aumento de los costos del servicio de telefonía móvil y de Internet.
La empresa de Telecomunicaciones de Cuba, Sociedad Anónima (ETECSA), empresa propiedad del Estado y única que presta los servicios en telecomunicaciones en Cuba, ha decidido aumentar, de una manera desproporcionada, los costos por sus servicios. El costo por 3 megas es de 3,600.00 pesos cubanos (CUP), cuando el salario mínimo mensual es de 2100.00 CUP. Estos precios dejan a la gran mayoría de usuarios sin posibilidades de hacer uso de un servicio que se ha convertido en algo básico para múltiples quehaceres, que van más allá de la comunicación verbal.
Para el régimen es una jugada que le trae varios beneficios: primero restringe el número de usuarios y le facilita su manía de vigilar a cuanto se mueve. Además, sabe que los emigrados, por tal de estar en comunicación con sus familias se ven obligados a pagar lo que les cobren y en Monedas de Libre Cambio, (MLC), dólares o euros, y por este medio ETECSA hace un gran negocio con las necesidades de sus ciudadanos emigrados e internos.
Los directivos de la empresa telefónica argumentan que se vieron obligados a tomar la medida de aumentar el costo de sus servicios con el pretexto de que estaban teniendo pérdidas por culpa de estafadores y que, "penosamente", esto los obligaba a aumentar los costos. Claro que el argumento es irrisorio, pero como decimos: "gánale al árbitro".
ETECSA es parte de un conglomerado de empresas del Grupo de Administración Empresarial, (GAESA) perteneciente al Ejército y que se maneja con margen de discreción absoluto y no tiene obligación de reportar el Estado de sus finanzas. Ellos y sólo ellos, los altos mandos del Ejército saben del todo entramado de empresas, algunas de ellas registradas en Panamá. Por cierto, últimamente han invertido, grandes cantidades de dólares en el sector turístico, desobligándose de abastecer alimentos y medicina para el pueblo.
La jugada no les ha salido del todo bien, como la dictadura está acostumbrada. Resulta que a los estudiantes de las principales universidades del país no les cayó nada en gracia tal medida pues los limita en sus fuentes de información para sus estudios y contactos con otros centros educativos y de investigación. La Federación de Estudiantes Universitarios (FEU), siempre muy proclive a la dictadura, ahora ha sido rebasada por la base del alumnado que han manifestado su descontento con el aumento del costo del servicio de Internet, a tal grado que la dictadura se ha puesto nerviosa y se han visto obligados a bajar un poco las tarifas con ofertas y otras promociones.
Por supuesto que estas ofertas serán temporales, durarán hasta que logren doblegar a los líderes universitarios rebeldes. Mantener una dictadura no es cosa fácil; se necesita poco corazón y no andar con sentimentalismos burgueses. Nada de que el pueblo opina, nada de derechos humanos. Por decreto, en Cuba "no hay hambre ni ninguna necesidad y se goza de libertad absoluta".