CUBA LIBRE, ¿PARA CUÁNDO?
Poco se sabe por estos rumbos de la nueva crisis por la que atraviesa el pueblo cubano, crisis que se está volviendo crónica y con alto grado de sufrimiento, paciencia y heroísmo por parte del pueblo, y un alto grado de represión por parte del Gobierno, que es lo que mejor sabe hacer: Reprimir al pueblo y hacer responsable de todas sus desgracias al tan odiado imperio y sin sonrojarse andar mendingando ayuda del tipo que sea por todo el mundo.
La solución está en manos y al alcance del Gobierno dictatorial, pero su visión del hombre, su filosofía de odio a todo lo que se parezca a progreso y sentirse los dueños de toda la isla, claro que con el pueblo incluido, les impide razonar cuerdamente y darle la libertad al cubano de a pie, al cubano que no pertenece al partido, a las fuerzas armadas o al aparato represor; ese pueblo que hace mas de sesenta años espera la libertad prometida y que en realidad despertó una verdadera esperanza al principio de la Dictadura y luego vino el "fuera máscaras", y a sufrir represión y falta de libertad.
En los años noventa, al caer la Unión Soviética, viene a empeorar la vida cotidiana del pueblo cubano. En el "Periodo Especial", Cuba deja de exportar azúcar y níquel, y de recibir ayuda de petróleo y alimentos, de lo que quedó de la URSS; y a ningún país de ese bloque le interesó seguir importando tales productos y menos aún, de pagar los altos precios que Cuba ponía a sus mercancías. En pocas palabras, la isla dejó de tener el interés geoestratégico para el exbloque comunista.
Fidel y compañía no fueron capaces de entender y de descifrar los retos que la nueva situación les planteaba y se fueron por la fácil: el pueblo aguantará hambre y miseria y se echará a andar la maquinaria de represión, cuyos mandos siempre están solícitos a servirle al régimen. El "Periodo Especial" fue realmente un verdadero sufrimiento para el pueblo cubano, carencia de todo, suena fuerte pero así fue, ¡carencia de todo!
Cuando Hugo Chávez llegó al poder en Venezuela, vino de nuevo la ayuda en petróleo y se incrementó la ayuda en otras áreas de la economía y Cuba le paga a Venezuela con médicos y expertos en seguridad. Muere Chávez y Nicolás Maduro toma el poder y, aunque se hermanan más los gobiernos de ambos países, ya la ayuda no resulta como en el periodo de Chávez; los precios de los energéticos caen y el mismo sistema venezolano entra en crisis, y la pobreza y represión del régimen Chavista, con Maduro en la Presidencia, se impone para mantener en el poder a ese grupo de maleantes que se sienten, y actúan, como dueños de Venezuela.
De nuevo el pueblo hermano de Cuba sufre hambre y represión: el temor a ser arrestado y sufrir las consecuencias por atreverse a manifestar su descontento por la hambruna, apagones, carencia de diferentes productos, donde el sueldo no les alcanza para cubrir lo mínimo de las necesidades. Repetimos, el temor se está desvaneciendo y cada vez es más común, aunque el régimen trate de ocultarlo, enterarnos de que el pueblo sale a las calles, sonando las cacerolas y por las noches con los apagones mucha gente sale a hacer lo mismo, pero con la seguridad de que los cuerpos represores no los podrá identificar.
Y como siempre el sistema no es capaz de darle libertad al pueblo; como siempre el culpable es el imperio; el responsable de los apagones es el imperio; la falta de pan es culpa del imperio. Lo que se les ha ocurrido a las autoridades es permitir que los cubanos que han hecho su vida en el extranjero, básicamente en EE.UU, puedan ingresar o mandar a su país todos los productos alimenticios, con su impuesto claro está, pero sin límite y hasta pueden traer o mandar los motores generadores de energía. Triste panorama de nuestros hermanos cubanos. Si el gobierno ha permitido eso, quiere decir que ¡el hambre y represión va para largo!