POBRE PANGOLÍN II
¡POBRE PANGOLÍN! II
Por J. C. M.
La prensa occidental ha magnificado la virulencia del coronavirus (2019-n CoV) y aullan para que el gobierno chino declarara una emergencia de salud internacional y una pandemia global, a pesar de tener una tasa de mortalidad relativamente baja según los datos oficiales de China pues, en realidad, la tasa de mortalidad sería mayor para la gripe regular.
En números redondos, al día (15 de febrero de 2019), los infectados en China suman 50,000 y los muertos llegan a 1,000. Hay que apuntar que la cifra de chinos muertos por este virus, en su mayoría son ancianos, desnutridos y que arrastran una gran carga de enfermedades. La pregunta obligada es: ¿Y esto es una pandemia, si los medios informan que las muertes por gripe en Estados Unidos de América en esta temporada han sumado 8, 200?
Todo este show, en el que han acusado al pangolín de ser el origen del coronavirus, es nada menos que una estrategia militar para atacar a la pujante economía de China. No olvidemos que Estados Unidos está aún en una guerra económica contra el gigante asiático.
Está comprobado que las características del virus no son otra cosa que el SARS, con las modificaciones genéticas propias de un laboratorio de bio-guerra.
No sería la primera vez que los Estados Unidos -que tiene un largo historial de uso bioterrorista- atacara otra vez a sus enemigos comerciales y políticos.
Recuerden a los guatemaltecos infectados deliberadamente de sífilis y gonorrea en 1940, o el experimento "Tuskegec", un estudio clínico llevado a cabo entre 1932 y 1972 en la ciudad estadounidense de Tuskegec (Alabama) donde infectaron a 600 aparceros afro-estadounidenses para observar la progresión natural de la sífilis. O que Estados Unidos tiene la patente exclusiva del ébola y que en los laboratorios de bio-guerra del Reino Unido han esparcido el mortal virus en Liberia, Guinea y Sierra Leona, o el brote de 2014 que fue el resultado de una operación militar de Estados Unidos con la participación del laboratorio de armas biológicas "Kanema", financiado por George Soros.
Tal parece que todas estas cosas no han sido noticia; han sido simplemente experimentos "científicos". Y ahora quieren bloquear a China para desatar una catástrofe comercial.
Un ejemplo: la guerra liberada por los cárteles que se disputan el comercio, las drogas y la "falluca" en el Barrio Bravo de Tepito, en la CDMX, han sido consecuencias del "cierre comercial de las fronteras en China y no están surtiendo el mercado voraz de sus productos y empiezan los jaloneos y dimes y diretes. Imagínese esto multiplicado por un millón a nivel global. Saquen cuentas del desastre financiero para los chinos.
Ésta es la verdadera guerra: con un simple "spray" pusieron de cabeza a una ciudad como Wuhan y a una economía como la de China, y han sacudido a los mercados globales de materias primas.
Los cargueros enfrentan una cuarentena de hasta 14 días. El retraso de embarques a los puertos chinos, el gas natural y licuado que llega a China lo devuelven aduciendo cláusulas de "fuerza mayor". China con su economía, es el consumidor más importante de materias primas del mundo.
No fueron misiles intercontinentales o bloqueos militares los que han pegado en la economía china, ha sido el "spray" que han dispersado en el centro de China, en la ciudad de Wuhan, que es el centro de comunicación férrea y aérea.
Así que, ¡ya basta!... ¡Dejen en paz al ilustre pangolín!